¿Tienes por casa algún mueble de madera viejo que estés a punto de “jubilar”? ¡No lo tires! Combinar una decoración moderna con elementos antiguos esta de moda. Sí, ya sabemos que “viejo” no es lo mismo que “antiguo” pero ¿sabes qué? Con un poco de trabajo y un par de trucos, casi cualquier mueble de madera se puede convertir en una pieza vintage. Nosotros te contamos cómo hacerlo.
01 Revisa el estado del mueble
Antes de hacer nada te recomendamos que inspecciones bien el mueble en busca de posibles señales de polilla. En caso de ver algún orificio sospechoso, no dudes en aplicarle el tratamiento pertinente o, mejor aún, en llevarlo a una cámara de autoclave. Te ahorrarás futuros problemas.
02 Desmonta y enmascara
Desmonta cualquier elemento que no sea de madera, como manillas, tiradores y bisagras. Saca también los cajones. Si hay alguna pieza que no puedas desmontar o que te interese conservar con su aspecto original, tápala con cinta de carrocero.
03 Restaura
Una cosa son los muebles viejos y otra los muebles rotos. Si el que nos disponemos a tratar tiene algún desperfecto serio o algún golpe profundo, debes repararlo ahora. Para golpes o vetas abiertas, nosotros te recomendamos Aguaplast Madera. Puedes consultar cómo se usa aquí.
04 Lija
Repasa todo el mueble con un taco de lija fina (más de Nº150) o, si es muy grande, con una lijadora orbital. El objetivo es dejar la madera cruda, es decir, libre de pinturas y barnices.
05 Pinta
La técnica de envejecido de muebles de madera consiste en deteriorar deliberadamente una capa superficial de pintura, de manera que permita ver la veta. Como el color blanco está de moda, nosotros te recomendamos que utilices Todo Terreno blanco, ya que es pintura e imprimación, todo en uno, con lo que te ahorrarás el tener que cerrar el poro con otros productos. Depende del nivel de veladura que busques, puedes darle una segunda capa o no.
06 Vuelve a lijar
Una vez que la pintura ha secado, ya podemos empezar a deteriorarla. Con una lija fina (nº 150 en adelante), repasaremos todo el mueble de manera irregular. Se trata de darle un aspecto avejentado, con lo que no pasa nada –es incluso deseable– si unas zonas quedan más lijadas que otras. Los cantos y las molduras, de hecho, quedan muy bien si se desgastan más; es por eso que puedes utilizar una lija más gruesa en esas zonas. El objetivo, en cualquier caso, es lograr que la veta vuelva a reaparecer en toda la superficie del mueble, a la vez que la pintura se deteriora de manera irregular.
07 Barniza
Ya tenemos nuestro mueble envejecido. Para rematar, aplicaremos una capa de barniz incoloro a la cera, que ayudará a protegerlo. Puedes escoger un barniz brillante, con el que conseguirás un resultado elegante, o bien uno mate, que le da un aspecto más natural.
¡Listo! ¿Qué te parece? ¡Estabas a punto de tirar ese viejo mueble y ahora es el centro de atención de la estancia!