¿Cuántas veces, trabajando con una brocha pequeña o una paletina nos encontramos con que la pintura acaba chorreando por el lateral del recipiente y mancha el suelo? Esto ocurre porque en trabajos pequeños rara vez recurrimos a una bandeja de pintura y solemos utilizar el lateral del bote para escurrir el exceso de pintura de la herramienta.
Hoy os traemos un truco muy sencillo pero que puede resultar de lo más útil en estos pequeños trabajos con pinturas o barnices. Consiste en poner unas cuantas tiras superpuestas de cinta de carrocero de lado a lado del bote. Escurriendo la herramienta contra ellas conseguimos que el exceso de pintura gotee en el interior del recipiente, en lugar de chorrear por el lateral. Además, cuando las cintas estén muy saturadas, siempre podemos cambiarlas, en lugar de pasar a escurrir la herramienta contra otro punto del borde, que es lo que normalmente hacemos.