Aunque las superficies exteriores suelen ser más duras y resistentes que las paredes interiores de la vivienda, eso no quiere decir que estén a salvo de sufrir desperfectos por golpes o rozaduras. Las esquinas, especialmente, suelen debilitarse por estar sometidas a la intemperie y se vuelven más y más sensibles con el tiempo. Hoy vamos a ver cómo reparar una esquina de nuestra fachada.
01 Retira las partes sueltas
Si la esquina ha sufrido un golpe, es posible que los bordes del desperfecto estén algo sueltos. Lo sabremos porque se desprenderán fácilmente al recibir unos golpes ligeros de martillo. Debemos retirar todas las partes sueltas antes de empezar nuestra reparación.
02 Limpia
El paso imprescindible en cualquier reparación. Debemos asegurarnos de que la superficie esté libre de polvo y demás restos que hayan podido desprenderse en el paso anterior.
03 Humedece la zona
Para asegurarnos de que el plaste que vamos a aplicar se adhiere perfectamente, es recomendable humedecer (que no mojar) ligeramente la zona. Podemos utilizar una brocha empapada en agua para hacerlo.
04 Mezcla el plaste
En este caso, al tratarse de una superficie exterior, vamos a emplear un plaste impermeable y que no necesita de puentes de adherencia. En concreto utilizaremos Aguaplast Impermeabilización.
Para hacer la mezcla añadiremos 0,25 litros de agua por cada kilo de producto y amasaremos bien hasta obtener una pasta consistente y sin grumos. Una vez que la obtengamos, contamos con 30 minutos para trabajar con ella.
05 Aplica el plaste
Aplicaremos el plaste con una espátula de acero inoxidable. Al tratarse de una esquina, resulta muy útil ayudarse, además, de una llana. Se coloca la llana en un plano de la fachada para que haga de tope mientras trabajamos en el plano perpendicular. Así conseguiremos una esquina perfectamente recta.
Por otra parte, la mayor parte de las fachadas no son lisas, por lo que no merece la pena esmerarse con la reparación, o podemos encontrarnos con que nuestro trabajo llama la atención más de la cuenta. ¡Al fin y al cabo se trata de que no se note que hemos reparado la fachada!
Cuando hayamos acabado limpiaremos las herramientas con agua abundante.
06 Pinta
Una vez que el plaste haya secado lijaremos la zona ligeramente para conseguir una superficie más lisa y después pintaremos con Todo Terreno al Agua o con una pintura especial para fachadas como Missil de Beissier. Si nuestra fachada es blanca, habremos terminado con este paso. En caso contrario, habrá que aplicar además un par de manos de la pintura que corresponda.
Como veis, reparar una esquina exterior es prácticamente igual que hacerlo en el interior de la vivienda. Eso sí, como siempre, es importante emplear el producto adecuado.