En Bricopared hemos dado a lo largo del tiempo un montón de ideas para decorar paredes y estancias de forma original. Hoy os traemos una idea más: pintar una pared con un efecto de degradado de color (puedes recordar algunas al final de este artículo). En este caso, y por simplicidad, no hablamos de un degradado uniforme entre la parte alta y la baja, que sería algo muy difícil de conseguir, sino de la aplicación de varias bandas horizontales, que se fusionan entre sí. Veamos cómo se logra este efecto.
01 Escoge una gama de colores
Nuestro consejo es que sean tonos pastel, que siempre son más agradables a la vista. Los colores vivos, ya lo sabéis, son un poco delicados cuando los aplicamos en una pared. En cualquier caso, podemos escoger colores contiguos de una pantonera, o bien un color claro y uno oscuro, y lograr los intermedios a mano. Esto lo haremos mezclando previamente ambos colores. Por ejemplo, podemos tener un bote con el color más claro y otro con el color más oscuro, y después dos intermedios con la siguiente relación: 25 % claro / 75 % oscuro; 50 % claro / 50 % oscuro; 75 % claro / 25 % osuro. Cuanto mayor diferencia haya entre el tono claro y el oscuro, más marcados serán los contrastes, cuanto menor sea, más uniforme será el degradado.
02 Pinta la pared completa con el tono más claro
Esta primera capa será la de preparación de la pared. Por lo tanto, asegúrate de que la superficie está limpia de polvo y grasas, que no hay desperfectos como agujeros o fisuras y, a poder ser, que esté imprimada.
03 Divide la pared
Debes marcar tantas franjas como tonos de pintura tengas. Para que el efecto sea bonito, las franjas deben tener el mismo ancho, así que mide bien la pared y usa una calculadora para saber qué ancho debe tener cada una. Puedes usar un hilo tendido de lado a lado de la pared y una tiza para marcar las franjas.
04 Pinta la segunda franja y difumina
Pongamos que has decidido pintar cuatro franjas y que irán de más claro en la parte alta a más oscuro en la baja (ese es nuestro consejo); bien, la primera franja, la alta, ya la tienes, pues es la del color de fondo que hemos aplicado a toda la pared. Ahora lo que toca es pintar la segunda (empezando desde arriba). Toma pues el segundo color y rellena el hueco que toca. Una vez que hayas terminado, y mientras la pintura está aún húmeda, toma una paletina plana de cierta anchura y difumina su borde superior dando pasadas verticales. De esta manera la pintura se extenderá cubriendo parte de la franja superior. Procura que estas pasadas verticales sean igual de amplias a lo largo de toda la franja. Podrías difuminar también el borde inferior, pero en realidad te viene bien mantenerlo nítido, pues así tienes una referencia de la anchura de la banda. Y, además, la pintura inferior, al ser más oscura, no va a tener porblemas en cubrir el borde de la banda superior.
05 Repite el proceso hacia abajo
Lo siguiente es obvio. Debemos dejar secar esta franja y, a continuación, repetir el proceso en la franja inmediatamente inferior con el siguiente color. Una vez difuminados los límites entre estas bandas, dejaremos secar y repetiremos el proceso con la cuarta y última banda. ¡Y listo!