El bricolaje puede ser un placer cuando se practica con la intención de crear, de hacer algo nuevo; resulta bastante menos satisfactorio cuando se trata de mantener las cosas en buen estado —aunque uno puede sentirse orgulloso del resultado—; y es algo estresante y penoso cuando es la realidad la que nos impone el bricolaje con desperfectos, roturas y desastres varios.
Es en esas situaciones cuando realmente se agradece que alguien haya pensado en ello y haya creado el producto preciso, el producto que necesitamos y que nos va a evitar muchos dolores de cabeza.
En Beissier tienen una solución para casi cada problema. Nosotros hemos imaginado cinco situaciones y hemos escogido cinco productos de Beissier para solucionarlas.
01 Consolidante contra las paredes que se desintegran
La niña crece y ese papel de pared con unicornios rosas ya no tiene sentido, así que te pones a arrancarlo con la intención de pintar después. Pero ¡oh, horror! ¡Parece que con el papel se viene media pared abajo! ¿Es que tu casa está hecha de arena?
No te asustes, es más habitual de lo que puedas creer. Los morteros viejos muestran a menudo poca consistencia. Son lo que llamamos “soportes pulverulentos” y, lejos de tener que picar para dejar el ladrillo visto y después reenfoscar (que es la pesadilla que te estará pasando por la cabeza a medida que te deshaces de los unicornios), puedes solucionarlo con la aplicación de un producto como Consolidante Para Piedra de Beissier.
Los consolidantes son productos que penetran en el mortero y se endurecen en pocas horas, dotando al soporte de una consistencia suficiente como para poder trabajar sobre ellos. Vaya alivio ¿no?
02 Minoxil contra tornillería de baja calidad
El foco que pusiste para iluminar el acceso a tu casa lo tiene todo: un pequeño panel solar para funcionar sin toma de corriente, un detector de movimiento orientable, un aspecto vintage de lo más resultón, protección contra los elementos IP66… Y unos tornillos de fijación que son una basura y ya han empezado a chorrear óxido.
Es un problema bastante habitual. Algunos fabricantes manufacturan productos estupendos, pero después la pifian incluyendo kits de fijación de baja calidad que no soportan las condiciones propias de la intemperie. Y claro, nunca se sabe cuánto va a durar una fijación corroída por el óxido. Sería una pena que te matase un foco autónomo vintage preciosísimo, así que lo que hay que hacer es sustituir esa tornillería cuanto antes por otra que sea inoxidable y de calidad. Pero ¿qué hacer si el tornillo o la tuerca ya se han agarrotado por el óxido?
A Minoxil lo llaman también “la lija líquida”. Se trata de un desincrustante de óxido que actúa solo. Es decir, simplemente hay que aplicarlo generosamente sobre la pieza oxidada y dejarlo actuar. Él solito se encarga de desprender la herrumbre, que es lo que impide que la tornillería gire. A no ser que hayas actuado demasiado tarde, sobre piezas absolutamente corroídas, Minoxil se las bastará para dejar cualquier tornillo en situación de girar normalmente.
03 Aguaplast Obrafácil contra el alien de tu trastero
Entras en tu trastero dispuesto a coger la bici para dar una vuelta y ves que en una de las paredes de hormigón hay una pequeña grieta de la que está saliendo una especie de bulbo palpitante que supura un líquido marrón. La cosa esa tiene el aspecto de ir a reventar de un momento a otro y a dejar salir un montón de arañas de pesadilla. ¿Es un caso para los bomberos o para el ejército? No lo tienes claro.
Pues ni unos ni otros. Lo que hay adherido al muro de tu trastero no es un alien, sino un ejemplo de algo conocido como “lagrimeo”. No queremos ponernos muy técnicos pero, en pocas palabras, se trata de una esfera ácida de cloruro férrico, y lo que indica es que, detrás de esa grieta, hay una parte del forjado del muro que se está oxidando.
Por supuesto, hay una solución para ese problema, y no es demasiado complicada. Lo que tienes que hacer es picar hasta dejar al descubierto esa sección del forjado, desincrustar el óxido con Minoxil, del que ya hemos hablado, y después cerrar el orificio con Aguaplast Obrafácil. ¿Y por qué con Aguaplast Obrafácil y no con cualquier otro mortero? Porque, debido a su composición, Aguaplast Obrafácil no libera alcalíes, con lo cual no es agresivo con los metales, algo importante en un forjado; máxime si ya ha empezado a oxidarse.
04 Prosil a favor de las casas de piedra
Vives en una casa de piedra antigua; una preciosidad que sale bien en todas las fotos. Pero claro, los años no pasan en vano y, aquí y allá, han empezado a aparecer señales de deterioro en la piedra o en la argamasa que une los sillares. Un problema de este tipo de edificios es que, aparentemente, no puede aplicarse ningún sistema sin alterar su aspecto. Pero solo aparentemente, porque lo que sí puedes hacer es hidrofugar las fachadas con Prosil.
El hidrofugado es un tratamiento transparente que modifica la tensión superficial de una superficie, de manera que el agua, al entrar en contacto con ella, se une en gotas que resbalan por acción de la gravedad. El hidrofugado, al contrario que la impermeabilización, no tapona los poros y, por lo tanto, no altera la transpiración del material en el que se aplica. Es decir, que con Prosil proteges el muro sin alterar su aspecto. En cualquier caso, antes de aplicar Prosil sería conveniente dar una mano de Consolidante para Piedra, a fin de afianzar las partes deterioradas.
05 Isolfix Plus Antimanchas contra el hollín que decora tus paredes
Para la próxima te lo apuntas: no hay que echar agua sobre el aceite de la sartén que ha prendido. Entretanto, lo que iba a ser un atracón de patatas fritas ha acabado siendo un pequeño incendio. No hay que lamentar pérdida de vidas, aunque por poco, porque tu mujer casi te mata. Ahora lo que toca es restaurar la cocina. Los muebles están encargados, pero de repintar te encargas tú, que tienes que recuperar puntos… Has limpiado las paredes cuanto has podido y ahora vas a liarte con el rodillo… ¿Pero qué pasa? ¡La pintura está arrancando el hollín con el que no pudo ni la lejía y se está mezclando con él! ¡Parece que estás pintando con pintura manchada!
Te presentamos una de las cualidades más odiosas del hollín; algo que no mucha gente conoce, porque, por suerte, tener que repintar una estancia que ha ardido no es muy habitual. Pero sí, el hollín se mezcla con las pinturas, sin importar la base de estas, y forma un engrudo bastante desagradable. A no ser, claro, que apliquemos Isolfix Plus Anti-Manchas; es decir, la versión al disolvente de nuestra pintura antimanchas favorita: Isolfix. Isolfix Plus Anti-Manchas fija los restos de hollín en su sitio y los bloquea en la primera mano. En la segunda y tercera aplicación los cubre definitivamente, algo que con una pintura corriente podría haberte llevado media docena de capas o más, fácilmente.