Decorar habitaciones infantiles con vinilos está de moda. No sólo son accesorios razonablemente baratos y muy aparentes sino que, además, hoy en día se puede encontrar en internet una enorme variedad de diseños. Pero es posible, dado que estás en Bricopared, que estés buscando algo más personalizado, algo que puedas hacer tú mismo y que nadie más tenga. Lo que buscas es la técnica del vinilo stencil.
Básicamente, la técnica stencil consiste en tomar una plantilla con el negativo y utilizarlo para imprimir el positivo sobre la pared o mueble que pretendas decorar. Es decir, que lo que quedaría sobre el lugar donde lo apliquemos sería un dibujo de los huecos de la plantilla. Obviamente, con esta técnica no podemos aspirar a lograr diseños con una gran variedad de colores, pero, a cambio, obtendremos un diseño realmente impreso en la superficie, en lugar de un vinilo pegado sobre ella. Además, podemos hacer que nuestros diseños sean absolutamente únicos e incluso involucrar a nuestros hijos en el proceso como si fuera un juego.
Si te hemos convencido, sigue estos pasos para hacer tu propio stencil y decorar las habitaciones de tus hijos con diseños únicos.
01 Buscar el diseño
Escoge un diseño que te guste o, mejor dicho, que guste a tus hijos. Puedes dibujarlo a mano o sacarlo de internet. Los dibujos animados infantiles suelen tener diseños relativamente sencillos, muy fáciles de transferir a una plantilla. Aunque se pueden hacer auténticas maravillas con stencil, si es tu primera vez no seas demasiado ambicioso y busca algo sencillo.
02 Adáptalo
En este paso debemos escoger qué tipo de diseño queremos imprimir sobre la pared. Aquí tenemos dos opciones: podemos imprimir el contorno de la figura o podemos imprimir el relleno.
En ambos casos debes tener en cuenta que, con un stencil, lo que queda impreso en la pared son los huecos de la plantilla, por eso hay que tener cuidado en dejar unidos ciertos elementos del diseño. Si, por ejemplo, nuestro dibujo incluye el contorno de un ojo, debemos interrumpir dicho contorno en dos o más puntos para que el interior del ojo quede unido al resto de la plantilla. Si no lo hiciéramos así, al recortar la plantilla el interior del ojo se desprendería y, en lugar de imprimir el contorno del ojo, imprimiríamos el relleno. Así pues, revisa tu diseño atentamente y une los elementos “flotantes” al resto del dibujo mediante huecos o trazos, dependiendo del tipo de de impresión que busques.
Si te has animado a hacer un dibujo a dos colores, en este punto deberás crear dos plantillas, una para cada color, puesto que las vamos a utilizar por separado. Se trata de hacer una plantilla exclusivamente con los elementos que irán en un color y la otra, con los que irán en el otro. Es decir, no deben repetirse elementos en ambas plantillas.
03 Imprime y recorta la plantilla
Tanto si has escogido un diseño de internet como si te has animado a hacerlo a mano, te recomendamos que lo imprimas o dibujes en una cartulina. Eso dará cierta rigidez a la plantilla, algo recomendable cuando la peguemos sobre la pared. Sin embargo, si piensas hacer un dibujo a varios colores, imprime las plantillas en láminas de plástico transparentes, preferiblemente en una copistería.
Una vez que tengas el dibujo o la impresión listos, toca recortarlo. Lo mejor es que utilices un cúter, así que, si has involucrado a tus hijos en el proceso, recuérdales que este paso no lo pueden hacer ellos solos.
04 Imprime el dibujo sobre la pared
Ya tenemos la plantilla y lista para ser usada. A continuación, escoge el lugar donde vas a imprimir el dibujo y fija en él la plantilla con cinta de carrocero. Si vas a pintar a dos colores, empieza por el color más claro.
Para pintar, Te recomendamos utilizar Todo Terreno de Beissier, ya que esta pintura puede ser aplicada sobre cualquier tipo de superficie (madera, cristal, pvc, yeso…). Además, se trata de una imprimación y una pintura todo en uno, con lo que te ahorrarás el paso de tener que imprimar previamente con otro producto. Dado que se trata de pintar un área pequeña, lo ideal es que utilices un rodillo pequeño o un tampón de gomaespuma.
Retira la plantilla
Deja secar unos minutos la impresión, siempre atento a que la pintura no chorree sobre la plantilla y manche la pared. Después, con mucho cuidado, quítala tirando desde una esquina.
Si tienes la intención de dibujar a varios colores, deja secar la primera capa completamente antes de fijar en su lugar la siguiente plantilla.
Ya tenemos listo nuestro stencil y la habitación decorada con un diseño único y original ¡Con un poco de maña podemos convertirnos en unos auténticos Banksis de andar por casa! Pero ¿y qué ocurre con nuestro propio dormitorio? ¿Os atrevéis con algo más clásico como unas molduras decorativas?