Las superficies de madera están presentes en multitud de lugares de nuestra casa: puertas, ventanas, muebles… Se trata de un material relativamente flexible, poroso y ligero, por lo que es común que se abolle o se quiebre.
Para reparar estos desperfectos necesitaremos un producto que se amolde a las particularidades de la madera permitiendo un fijado correcto, con una gran capacidad de relleno, que sea flexible y capaz de adaptarse a las deformaciones de la madera y que además tenga un aspecto similar a ella. Aguaplast Madera cumple con todos estos requisitos.
Este tipo de masilla está disponible en diez colores (negro wengé, sapeli, cerezo, haya, neutro, nogal oscuro, nogal claro, caoba, pino y roble), así que puedes elegir el que más se adapte al tono de la superficie a reparar. Te aconsejamos hacerle una foto con el móvil al elemento que pretendas arreglar y llevarla contigo a tu centro de bricolaje o ferretería para escoger el tono más adecuado.
Los pasos que has de seguir para solucionar un hundimiento o fractura en una superficie de madera son muy sencillos:
01 Aplica el producto
Amasamos el tubo con las manos para ablandar el producto y lo aplicamos sobre la superficie a reparar con el mismo tubo o con una espátula. Si la hendidura es muy profunda tendremos que aplicar varias capas, hasta rellenarla completamente. Para una buena conservación del material, antes de cerrar el tubo puedes expulsar el aire que quede dentro apretándolo ligeramente.
02 Repasa
Alisamos la superficie con una espátula. El proceso de alisado es el mismo que con cualquier otra masilla: simplemente arrastra la espátula en paralelo a la pared con un ángulo aproximado de 40º. (Para más detalles, échale un vistazo a nuestro artículo sobre cómo arreglar pequeños desperfectos en la pared). Si la zona a reparar es muy pequeña puedes utilizar el dedo tal y como se muestra en la foto inferior.
03 Deja secar y lija
Espera al completo secado de la masilla, entre 1 y 4 horas. En caso de que haya quedado alguna imperfección en el momento de alisado, puedes lijar el producto fácilmente.
Truco: Para igualar el aspecto final, te puede ayudar dar unos toques de barniz o cera con un paño sobre el repaso de masilla, justo en la superficie reparada. ¡Ya está, el desperfecto que afeaba tu superficie de madera ha desaparecido!