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Soluciones prácticas de bricolaje, reparación y tratamiento de superficies.

Por Beatriz Atienza – www.micasanoesdemuñecas.com

Todos los objetos o piezas antiguas que, por una cosa u otra, caen en desuso… ¡merecen una segunda oportunidad! Con un poco de imaginación e ingenio pueden convertirse en lo que nosotros queramos. Reciclar y customizar está de moda, es tendencia decorativa y por eso yo he decidido crear mi propio revistero con unos buzones antiguos y viejos de portal. ¡Es muy, muy sencillo! En sólo cinco pasos lo tendréis hecho:

  1. Lo primero de todo es conseguir unos buzones, claro. Yo los saqué de las obras que estaban llevando a cabo en un portal. Iban a terminar en el chatarrero y los rescaté. Así estaban cuando me los llevé a casa.

Buzones viejos

2. Después decidí el aspecto final que les iba a dar y conseguí todo el material. Sólo se necesita: un paño y una lija de agua, cinta aislante, pintura Todo Terreno y pintura en spray del color que quieras (en mi caso, un tono rosa intenso). Todos los productos se pueden conseguir en superficies de bricolaje.

3. Para comenzar hay que limpiar y lijar el buzón (y quietarle así cualquier impureza o residuo que tenga adherido) y tapar con cinta aislante las zonas del mismo que quieras que se conserven con el color original. Yo he dejado del mismo color los marcos de la zona del buzón en la que se colocan los nombres.

Proteger buzón4. Después (y este paso es muy importante) hay que preparar el buzón para se pintado de su color final. Con una brocha o rodillo pequeño cubres la superficie de todo el buzón con la pintura Todo Terreno. Es una pintura de fondo muy potente que convierte todo tipo de superficies (incluido el metal de este buzón) en superficies adherentes para su posterior esmaltado o barnizado. Yo he aplicado dos capas de esta pintura y la he dejado secar unas dos horas.

5. Por último, una vez está seca esta pintura, añades la del spray que le dará el tono final que buscabas. Puedes darle tantas capas como quieras y el color se irá hacienda más intenso. Una vez pintado de su color final, lo dejas secar otro par de horas.

¡Y listo! ¡Ya está! Así ha quedado mi buzón-revistero que ya he colocado en uno de los rincones del salon de mi casa.

Convertir buzones en revisteros

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Comentarios de otros usuarios:

Daniela dice:

¡Es una chulada!

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