En ocasiones nuestras paredes pueden mostrar desperfectos bastante profundos. ¿Qué entendemos por profundo? Nos referimos a grietas, agujeros o rozaduras que tienen una profundidad de más de 5 mm y que por tanto necesitan ser reparados con plastes o masillas capaces de cubrir grandes espesores.
Este tipo de masillas también pueden ser necesarias si la superficie muestra anclajes defectuosos, tomas de enchufes, cuadros de luz anulados o agujeros de tuberías que ya no se encuentran en funcionamiento, tal y como muestra la foto inferior.
Como hemos visto, la masilla debe tener unas características determinadas: ser capaz de emplastecer grandes espesores, que no se agriete, que no merme y, finalmente, que se seque rápidamente para facilitar al máximo el trabajo.
La solución que te proponemos para eliminar estos antiestéticos desperfectos es sencilla, tan solo has de seguir estos 3 pasos:
01 Amasa el producto
Un plaste que se adapta muy bien a los requerimientos mencionados anteriormente es Aguaplast Rellenos. Mezcla el producto con agua (1 kg por cada medio litro de agua) y amásalo hasta que adquiera una textura cremosa. Podrás utilizar la mezcla durante aproximádamente una hora, lo que seguramente te resultará tiempo suficiente para arreglar el desperfecto.
También puedes utilizar Aguaplast Capagruesa, empleando las mismas proporciones. Esta masilla podrá ser utilizada durante 30 minutos/una hora.
02 Aplica la masilla
Al igual que hemos visto en el artículo sobre cómo arreglar pequeños desperfectos en la pared, necesitas rellenar el desperfecto con masilla. Procura limpiar y lijar los alrededores y el interior del agujero para facilitar la adherencia del producto, así como eliminar la pintura deteriorada que lo rodea.
Como siempre, arrastramos la espátula o llana en un ángulo de 40º sobre el deterioro con la intención de dejar la masilla lo más lisa posible y evitando que queden surcos sobre ella.
03 Secar, lijar y pintar.
Para rellenos inferiores a 5 mm de espesor, tras pasar 2 o 3 horas ya podemos lijar el arreglo para eliminar imperfecciones y garantizar que la pared quede lo más lisa posible. Si has aplicado más de 5 mm, te recomendamos esperar 24 horas para garantizar un secado completo.
Ahora ya puedes pintar encima para disimular el arreglo. ¡Listo!
